¿Por qué le interesa la Amazonía a Francia y a Emmanuel Macron?

El presidente francés Emmanuel Macron realizó una histórica visita a Brasil, convirtiéndose en el primer mandatario francés en viajar al país sudamericano en 11 años. Su gira comenzó en Belém, la ciudad amazónica que será sede de la COP30 en 2025, y continuó en la Guayana Francesa, el único territorio amazónico bajo soberanía europea.

Durante su estancia de tres días, Macron centró su agenda en cuestiones ambientales y en la promesa de apoyo financiero para la Amazonía. En Belém, Macron y el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva anunciaron una inversión de mil millones de euros para la Amazonía brasileña y la Guayana Francesa. Sin embargo, este financiamiento se desplegará en un período de cuatro años, con la participación tanto de fondos públicos como privados, según comunicó el Palacio del Elíseo.

Es importante destacar que este acuerdo enfatiza que la financiación se destinará principalmente a impulsar una transformación económica en la región, más que a conservar la Amazonía. Francia aboga por una bioeconomía que promueva la biodiversidad y al mismo tiempo genere oportunidades económicas para las comunidades locales. Esto incluye el impulso de mercados de carbono en la región, donde las empresas pueden comprar bonos de carbono para compensar su huella de carbono, contribuyendo así a la preservación de los bosques y la reducción de la deforestación.

Esta postura es compartida por Lula da Silva, quien expresó durante la visita su deseo de que la Amazonía no se convierta en un santuario, sino que sea un espacio de exploración y desarrollo sostenible.

Durante su recorrido, Macron también otorgó la Legión de Honor al líder indígena brasileño Raoni Metuktire, reconocido por su activismo en la protección de la Amazonía. Raoni aprovechó la oportunidad para instar a Lula a detener el proyecto del tren Ferrogrão, que teme que cause un impacto negativo en el medio ambiente.

Esta visita marca un cambio significativo en las relaciones franco-brasileñas, que estuvieron marcadas por tensiones durante el mandato de Jair Bolsonaro. Macron había criticado duramente la gestión de Bolsonaro frente a los incendios en la Amazonía en 2019, lo que provocó una escalada de tensiones entre ambos líderes. Sin embargo, con la llegada de Lula a la presidencia, se abre una nueva etapa de diálogo y colaboración en temas medioambientales entre Francia y Brasil.

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