El aumento de temperatura del Mediterráneo está matando a las gorgonias rojas y blancas en la Costa Brava
Las olas de calor marinas están matando las gorgonias en la Costa Brava del Mediterráneo. Especialmente afectada está la gorgonia roja, con una tasa de mortalidad del 80%. Esto amenaza la biodiversidad y el turismo de buceo. Es necesario actuar contra el calentamiento global en la región.
Las recientes olas de calor marinas están provocando estragos en el ecosistema del Mediterráneo, especialmente en la vida submarina de la Costa Brava. Históricamente, las gorgonias han adornado sus aguas entre los 15 y 30 metros de profundidad, pero ahora están muriendo debido al estrés térmico. Expertos advierten que en quince años podrían encontrarse únicamente a más de 30 metros, lo que impactaría la biodiversidad y desalentaría a los buceadores.
Para evaluar el impacto, el proyecto CorfunTED2021-131622B-I00, financiado por el Ministerio de Ciencia y Tecnología y la Unión Europea, organizó jornadas de ciencia ciudadana marina. Con la participación de voluntarios y científicos, se constató que todas las poblaciones de gorgonias mostraban mortalidad, siendo la gorgonia roja la más afectada, con una tasa de afectación del 80%. Estas jornadas, parte de los "Coralligenous Weekends", contaron con la colaboración de Observadores del Mar y fueron coordinadas por biólogos marinos de la Universidad de Barcelona y el Instituto de Ciencias del Mar del CSIC. Se evaluó el impacto en más de 10.000 gorgonias blancas y rojas en distintos puntos del litoral, evidenciando una mayor afectación en la zona norte.
El estudio reveló que las gorgonias ahora se encuentran mayormente más allá de los 30 metros de profundidad, con una grave afectación en los primeros 20 metros. Este cambio afecta no solo la biodiversidad, sino también el atractivo turístico de la región para los buceadores. Las gorgonias, fundamentales en el ecosistema submarino, actúan como refugio para diversas especies. Su degradación representa la pérdida de funciones y servicios ecosistémicos esenciales. Aunque se creía que la gorgonia blanca resistiría más que la roja, ambos tipos muestran una alta vulnerabilidad.
El próximo año se planea repetir el estudio en otras áreas de la costa catalana, donde la presencia de gorgonias indica un buen estado de salud marina. La falta de información sobre su distribución en ciudades como Barcelona y Tarragona subraya la urgencia de acciones para mitigar los efectos del calentamiento global en el Mediterráneo.
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